2 Corintios 4:16-18
Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre
exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día. Porque
esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente
y eterno peso de gloria; no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que
no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son
eternas.
Pablo a través del versículo
nos dice que no nos desanimamos, quizás por el momento podemos estar viviendo
un proceso agotador, cansador…pero es por ese proceso o situación en donde Dios
interiormente está renovando nuestras fuerzas y nuestra vida espiritual.
También la palabra de
Dios nos está diciendo que nuestros problemas son ligeros, que son momentáneos,
que podemos sentirnos cansados pero solo para pedir que Dios nos renueve, que
podamos ver las cosas que no estamos viendo, es decir que podamos ver aquello
sobrenatural que Dios está haciendo en nosotros, porque todo lo que da Dios es
eterno, no tiene fin, los problemas pasarán.
Cuando leemos este versículo de seguro podemos sentir como
el Espíritu Santo nos anima a seguir esta carrera, porque puede que estés pasando
por un momento duro y difícil, quizás tus relaciones personales están siendo
afectadas por la desilusión, la mentira, el engaño…. Pero es temporal, todo lo
que puedas estar viviendo es temporal…. Pero todo lo que vives en tu interior
con tu relación con Cristo será eterno….
¿Será bueno arriesgar tu relación con Dios por un
sentimiento temporal?... sé que no es fácil caminar y mirar hacia el cielo
cuando estas siendo atacado por diferentes áreas de tu vida, pero no debemos olvidar que Dios nos ha dicho:
“Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te
anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. Porque
yo Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador”… Cuantas veces nos hemos sentido tan desanimados que ya nos
vemos en lo profundo del mar, o en un abismo sin salida… y Dios con su infinita
misericordia nos ha dado la victoria, puede que esta vez te sientas aún más mal
y más cansado…. Pero no estás solo, alguien te sostiene, alguien ha prometido jamás
dejarte, Dios te conoce y sabe lo que estas sintiendo.
Es verdad que en momentos como estos es difícil arrodillarse
y humillarse en la presencia de Dios, porque no estás viendo una esperanza,
será muy muy difícil, pero no es imposible, quizás no tengas palabras para
decirle a Dios, pero basta con que reconozcas cuanto necesitas de Él.
Comencemos a esperar en Dios, a pedirle que podamos ver
aquello que nuestros ojos naturales no ven al estar siendo cegados por el
problema, confesemos nuestra necesidad y dependencia de Él. Desecha el corazón
herido y permite que el espíritu Santo te ministre y haga brotar en ti la
paciencia, la alegría, la esperanza y la paz de Dios en tu vida.
El pueblo de Israel cuando paso por el desierto, ellos tuvieron
todo lo que pidieron, Dios le dio calor, comida, agua, calzados… no te
preocupes porque Dios es un Dios Real que está en control de todo y es un Dios
que cumple sus promesas, créele y aférrate a Dios, no renuncies y no permitas
que este problema te aleje de Dios.
Dios lo ha permitido porque
quiere capacitarte para hacerte un hombre fuerte y valiente como Josué.
Bendiciones.